Skip to main content

Descubre por qué te cuesta adaptarte a los cambios en el trabajo y cómo resolverlo

Por febrero 16, 2021marzo 28th, 2023Gestión del cambio y toma de decisiones

¿Te está costando asimilar los cambios laborales? ¿No acabas de soltar lo viejo? ¿Sientes una desazón que no te deja avanzar?

 

Descubre los 3 pasos imprescindibles para hacer la transición a una situación profesional nueva y recuperar la energía y la calma.

 

Este año nos ha retado a todos.

 

Quien más y quien menos está viviendo en estos momentos algún cambio laboral.

 

Quizá te enfrentas como empleado a cambios organizativos, a nuevas funciones o a nuevas condiciones de trabajo; quizá has perdido tu empleo o eres el dueño de un negocio que atraviesa dificultades.

 

No tiene por qué ser un cambio drástico para que te sientas amenazado o descolocado.

 

El cambio es una situación nueva que afecta a tu zona de confort, donde te encuentras seguro porque todo te resulta familiar.

 

Y tú necesitas «digerir» todo eso y «re-situarte».

 

Experimentar tu propia transición personal, asimilar el cambio, aceptarlo y realizar la transformación interna necesaria para seguir adelante en la nueva situación.

 

Y ahí afuera oyes muchas generalidades como “las crisis son una oportunidad”, “de las crisis se sale más fuerte” y “hay que reinventarse”. Pero, francamente, de poco te sirven para gestionar esa transición a una situación nueva que te ha venido impuesta.

 

Yo, particularmente, prefiero tener algo concreto que sirva de guía en el camino, que me ayude a transitarlo de un modo menos doloroso y más efectivo.

 

Un recurso que puede ayudarte a superar el miedo a los cambios en el trabajo y a mejorar tu capacidad de adaptación es conocer cómo funcionan los procesos de cambio y cuáles son las claves para asimilarlos.

 

Inspirándome en el modelo de transiciones de Bridges, en mi propia experiencia personal y en mis observaciones sobre los procesos de cambio de mis clientes y sus negocios, te presento unos consejos concretos para realizar tu transición personal a través de las 3 etapas de un proceso de cambio.

 

LAS 3 FASES DEL PROCESO DE CAMBIO Y CÓMO TRANSITARLAS

 
  1. PON FIN A LA ETAPA ANTERIOR.

Antes de asumir los cambios y estar de nuevo totalmente “operativo” necesitas asimilar que las cosas ya no serán como eran antes.

 

La reacción natural a los cambios que percibimos como negativos o amenazantes es de negación, de rabia o de miedo.

 

¿Qué puedes hacer para no quedarte ahí más de la cuenta?

 

Realiza un “cierre consciente”.

 

Dedica un tiempo a reflexionar sobre lo que has hecho en la etapa que dejas:

  • Pon un poco de perspectiva sobre lo que dejas: ¿qué has estado haciendo?, ¿qué papel jugabas? ¿estabas satisfecho? ¿tenías recorrido? ¿encajaba en tus valores?.

Quizá no era tan bueno para tí como creías o había dejado de serlo.

Quizá era estupendo, pero ha terminado.

  • Haz una lista con tus logros y dales el reconocimiento que merecen.

  • Acepta los errores, analízalos y aprende de ellos .

  • Piensa en las personas que te han acompañado y lo que te han aportado, bueno, malo o regular. ¿Qué te llevas de tus contactos profesionales?.

 

¡Recoge todo ese aprendizaje de un modo consciente para que te sirva en la siguiente etapa!

 

Ahora estás listo para “soltar” lo viejo: tu cargo, tu sueldo, tu status, tus hábitos…

 

Ya está, no necesitas volver ahí. Te toca seguir hacia delante.

 

2. DATE UN TIEMPO PARA ACEPTAR Y REACCIONAR

 

¡Pero no tan deprisa!. Ahora te queda una especie de vacío, un montón de hábitos y rutinas que te daban tranquilidad y que ya no tienen sentido…

 

Se abre una etapa de incertidumbre: no sabes cómo será tu nuevo trabajo o tu nuevas funciones, o no sabes qué cambios implantar en tu negocio.

 

En esta segunda fase necesitas “digerir” el vacío que deja lo viejo, experimentar la tristeza, el abatimiento.

 

Permítete sentirte triste y vulnerable mientras te preparas para un nuevo comienzo.

 

No puedes pretender lograr grandes resultados en esta etapa ni ser muy productivo o creativo.

 

Pero sí puedes ir dando algunos pasos:

  • Ajusta tu brújula: qué valores te orientarán en la nueva etapa.

  • Explora nuevas posibilidades de acción.

  • Proponte pequeños objetivos que te vayan acercando un nuevo inicio.

  • Averigua qué nuevas habilidades necesitarás, fórmate y entrena.

 

3. COMIENZA DE NUEVO

 

La fase final implica que te lanzas de lleno a una nueva situación o reto.

 

Ya has aceptado el cambio, has recogido los aprendizajes de la situación anterior y tienes de nuevo la confianza para continuar tu camino.

 

¿Qué puedes hacer para aumentar tu autoestima, ganar confianza en ti mismo y asegurarte mejores resultados?

 
  • Visualiza tu nuevo proyecto, tu nuevo rol en la empresa o tu nuevo modelo de negocio

  • Diseña un plan de acción con objetivos claros y realistas

  • ¡Ponte en marcha!

Cree en ti y en tus posibilidades: confía en tus propias competencias, traza un plan de acción y apóyate en tu red de contactos

 

Si has leído hasta aquí, quizá ya has encontrado alguna pista sobre por qué no estas consiguiendo asimilar los cambios, por qué no logras la energía y la motivación necesarias para afrontar los nuevos retos o de por qué los cambios que quieres implantar en tu equipo no están funcionando como esperabas.

 

A menudo nos saltamos las dos primeras fases del proceso. Vamos directos al “esto es lo que hay, y punto”, y nos lanzamos a comenzar de nuevo.

 

Sin embargo, ese camino puede ser más penoso de lo necesario porque llevamos una mochila llena de vivencias, de hábitos y de emociones que debimos soltar en su momento.

 

Si quieres un proceso de transición exitoso debes recorrer las tres etapas.

Recuerda que no se trata de una mera aceptación de las nuevas circunstancias. Se trata de integrar psicológicamente el cambio y transformarse, logrando una mentalidad adecuada para el nuevo comienzo.

 

Aquí tienes el resumen del proceso de cambio, con las emociones propias de cada etapa y las acciones que pueden ayudarte a hacer tu propia transición.

 
 

¡es TU TURNO!

 

Antes de pasar a otra cosa, dedícate un momento y responde:

  • ¿En qué fase te encuentras ahora?

  • ¿Has pasado por las tres etapas?

  • ¿Qué acciones concretas puedes realizar para mejorar tu capacidad de adaptación al cambio?

 

TIP EXTRA

 

Mientras tú vives tu propio proceso de transición, observa a las personas de tu entorno más cercano, tu familia o tu equipo de trabajo.

 

¿Cómo les afecta el cambio que estás viviendo? ¿En qué etapa te parece que están ahora?¿Cómo puedes facilitarles su propia transición para superar la incertidumbre y generar una sensación de seguridad y confianza?